A ver, se que me rayo muchísimo que soy cabezota y que me pico con mucha facilidad a la mínima tontería pero me siento como una pequeña niña, muy egoísta y que, aún sabiendo la cantidad de problemas que tiene la gente, llora porque no sabe si la quieren.
He llegado a una conclusión que más dará eso en un mundo en el que no le importo a nadie? No se ni por que dejo escrito esto que siento, aun sabiendo que nadie quiere leerlo, que nadie quiere saberlo, aun sabiendo que en realidad no existo para la gente a la que quiero. No soy más que una sombra de lo que piensan. No les importa como vea las cosas. Agradecen, a veces, mi compañía, mis bromas, mi sonrisa siempre presente. Pero en el fondo, quieren que me calle, que me quede quieta, que no me mueva, que desaparezca. Me piden que sea otra distinta y que, obviamente no puedo ser; me piden que sirva de decoración pero no moleste. Y mi sonrisa sin embargo, persiste. Aunque las lágrimas inunden mis mejillas, mi sonrisa sigue ahí. Me acompaña vaya a donde vaya. Me da igual que solo sienta ganas de llorar. Puedo esconderlo todo tras mis labios. Si, definitivamente, se acabaron las sonrisas falsas con las que se pretenden ocultar sentimientos. No voy a ser la chica-sonrisas, lo siento, no puedo aguantar ese papel. Una mierda de papel, por cierto. Porque a veces, un par de lagrimas no viene mal.
Oh, esperad...puedo? No, creo que no, al menos ya no. Estoy cansada de todo y si, me he planteado varias veces desaparecer, coger las cosas e irme. Irme lejos, muy lejos, donde nadie pueda encontrarme. Bueno, que mas dará Si total, a nadie le importaría que desapareciera. Soy invisible, pero tengo sentimientos. Putos sentimientos. Lo tengo claro, de mayor quiero ser una piedra, sin sentimientos, asi me libro de tanta tontería, tantas gilipolleces.
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